El 14 de marzo de 2006 se produjo la rotura de la presa Ka Loko en la isla de Kauai (Hawái).

Las imágenes y los datos empleados en la realización de este post se han obtenido a partir de los siguientes documentos:

– Irfan A. (Alvi Associates, Inc.) 2015. Human factors in dam failure & safety. Case study: Ka Loko dam failure. 2015 ASDSO Northeast Regional Conference (en adelante, Irfan A., 2015).

– Carson Godbey, R. (Special Deputy Attorney General.) January 2007. Report of the Independent Civil Investigation of the March 14, 2006, Breach of Ka Loko Dam (en adelante, Carson Godbey, R., 2007).

– Mejia, L. (URS Corporation, Oakland, California). December 28, 2006. Engineering Assessment of Breaching Failure of Ka Loko Dam Final Report (en adelante, Mejia, L., 2006)

Mapa con la localización de la presa Ka Loko
Mapa con la localización de la presa Ka Loko. Fuente: Irfan A., 2015

DESCRIPCIÓN E INFORMACIÓN HISTÓRICA DE LA PRESA KA LOKO

La construcción de la presa finalizó en el año 1890. Se trataba de una presa de materiales sueltos, relativamente homogénea, ejecutada mayoritariamente con un material limo arcilloso. Al inicio, la presa tenía una altura de 9 metros y se le practicó un recrecimiento en el año 1912, alcanzando una altura de 13 metros.

La presa disponía de un desagüe de fondo constituido por una conducción de 450 mm de diámetro regulada mediante una válvula.

El aliviadero de la presa consistía en un canal rectangular de 4,5 metros de anchura y 0,45 metros de altura. Se sabe que dicho canal presentaba un revestimiento de hormigón ejecutado en 1950. Según croquis realizados en campo la cota del umbral de aliviadero era 227,70 m, y la cota de la coronación de la presa, medida en tres puntos diferentes era: 228,50 m, 228,55 m y 228,80 m.

Se tiene conocimiento de que en el periodo comprendido entre los años 1940 y 1953, el embalse vertió por el aliviadero, al menos, en 20 ocasiones, y en algunos casos durante períodos de 1 mes. No hay documentado ningún deterioro de la presa durante esos eventos de vertido por aliviadero.

En la imagen siguiente se muestra la ubicación probable del aliviadero, aunque no se pudo confirmar la ubicación de dicho aliviadero tras la rotura de la presa.

Ubicación probable del aliviadero de la presa Ka Loko
Ubicación probable del aliviadero de la presa Ka Loko. Fuente: Irfan A., 2015

El abastecimiento se destinaba al suministro de agua para la industria de la caña de azúcar. En el año 1971 cesaron las actividades relacionadas con el negocio de la caña de azúcar y se redujo el mantenimiento de las instalaciones.

En 1973 una parte del embalse se cedió a Mary Lucas Trust, con James Pflueger como beneficiario y fideicomisario.

En el periodo comprendido entre los años 1978 y 1981 el organismo responsable inspeccionó las presas de alto riesgo, pero la presa Ka Loko fue clasificada como de bajo riesgo.

En el año 1987 Pflueger compró la parte restante del embalse y pasó a ser el titular, teniendo el control general del embalse y la presa. En ese mismo año, el Departamento de Tierras y Recursos Naturales (Department of Land and Natural Resources, en adelante DLNR) pasó a ser la agencia estatal reguladora de la seguridad de las presas en Hawái.

En el periodo comprendido entre los años 1993 y 1998 las empresas consultoras que prestaban asistencia técnica a DLNR llevaron a cabo las inspecciones de las presas clasificadas de alto riesgo, sin embargo, la presa Ka Loko continuaba clasificada como de bajo riesgo.

En el año 1997 se llevó a cabo una actuación en el embalse sin permiso, el Condado de Kauai ordenó detener el trabajo, pero el alcalde consiguió que el Condado no alcanzara su objetivo. De hecho, durante ese mismo año, se llevó a cabo una actuación adicional consistente en el relleno del aliviadero. El titular fue advertido por el subcontratista que el aliviadero desempeñaba una función importantísima en la seguridad de la presa y que debería restaurarse, pero esta opinión no fue tenida en consideración por el titular de la presa.

En el año 1998, un agente estatal comunicó por escrito al titular de la presa que el aliviadero tenía que ser restaurado para evitar el sobrevertido por la coronación de la presa, pero el titular tampoco atendió este requerimiento.

En el periodo comprendido entre los años 1999 y 2001 DLNR envió tres cartas al titular de la infraestructura para programar la inspección de la presa y una carta recomendando la elaboración e implantación de un Plan de Emergencia de la presa. No se recibió respuesta por parte del titular de la presa.

En el periodo comprendido entre los años 1999 y 2006 DLNR pierde los fondos destinados a las inspecciones de la presa y el supervisor se jubila en 2005, sin haberse llevado a cabo inspecciones en la presa. En 2002 las agencias federales y estatales detectan infracciones, incluyendo la ausencia de aliviadero, y en 2006, unos días antes de producirse el colapso de la presa se impone una sanción de 12 millones de dólares por delitos graves y daños ambientales.

CONSECUENCIAS DE LA ROTURA DE LA PRESA

Con la rotura de la presa se estima que 1,6 millones de toneladas de agua y sedimentos alcanzaron la Bahía de Kilauea, arrancando árboles a su paso, arrastrando coches, destruyendo construcciones y con la pérdida de siete vidas humanas. El evento fue considerado como una tragedia humana y un desastre ambiental.

En 2008 se estableció que el titular de la presa y otras partes involucradas debían indemnizar a las familias de las víctimas y a los propietarios afectados con una cantidad de 25 millones de dólares.

El titular de la presa fue acusado de homicidio involuntario y condenado por imprudencia temeraria a 7 meses de prisión en el año 2014.

CAUSAS DE LA ROTURA DE LA PRESA

Entre los meses de febrero y marzo de 2006 tuvo lugar un periodo de 42 días en el que se produjeron fuertes lluvias, tratándose del tercer periodo más lluvioso de los últimos 50 años.

A finales de febrero de 2006 se produjo la rotura de un puente por una avenida cerca de la presa Ka Loko. En esas fechas, se realizó una inspección de la presa por personal que NO pertenecía a DLNR, pero finalmente no se citó nada en referencia a la falta de aliviadero en la presa.

El día 14 de marzo de 2006 a las 5:00 h de la mañana se produjo la rotura de la presa, teniendo lugar sobrevertido por la coronación.

Rotura de la presa Ka Loko
Rotura de la presa Ka Loko. Fuente: Irfan A., 2015

Según el informe Carson Godbey, R., 2007, en algunos croquis de campo se mencionaba la existencia de filtraciones importantes en la base de la presa. De hecho, el informe final de KAWMS de junio de 1984 advertía que los estudios de campo realizados por ingenieros del Servicio de Conservación de Suelos (SCS) indicaban que la estabilidad estructural de la presa Ka Loko era cuestionable, debido a las filtraciones observadas en la base de dicha presa y al crecimiento de vegetación densa y de porte en el paramento de aguas abajo de la presa.

Un mecanismo de fallo posible estuvo asociado al sobrevertido por la coronación de la presa, que erosionó el talud de aguas abajo y el cimiento de la presa, dando lugar a la formación de una brecha. Por esta razón, es muy importante que exista un aliviadero operativo que evite el sobrevertido por coronación en una presa de materiales sueltos. Tras la rotura de la presa no se encontraron indicios de existencia de aliviadero. El Doctor Lelio Mejia inspeccionó el lugar tras la rotura de la presa y tampoco encontró indicios del aliviadero que aparecía en fotografías y croquis antiguamente. Todo ello indicaba que la causa probable del fallo de la presa fue el sobrevertido por coronación.

Sin embargo, no se pueden descartar otros modos de fallo posibles. La erosión interna del cuerpo de presa o de los materiales del cimiento por la existencia de filtraciones también pudieron dar lugar a la formación de la brecha. De hecho, durante varias décadas existió una preocupación por las filtraciones que estaban teniendo lugar en la presa.

LECCIONES APRENDIDAS

Según el informe Mejia, L., 2006, es probable que la presa Ka Loko fallara debido a un sobrevertido por coronación como consecuencia de la falta de un aliviadero en el embalse. Por lo tanto, es necesario que los embalses dispongan de un aliviadero adecuado capaz de laminar las avenidas en condiciones de seguridad. No obstante, las circunstancias en que tuvo lugar este incidente y las características de la propia presa implican tener en consideración otros posibles modos de fallo que pudieron tener lugar, como la erosión interna. En cualquier caso, se considera fundamental llevar a cabo acciones con la finalidad de evitar que tales modos de fallo se desarrollen en otras presas en el futuro.

Después del 14 de marzo de 2006, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, en colaboración con DLNR y Protección Civil inspeccionaron un total de 54 presas. Los equipos de inspección encontraron, al menos, una deficiencia en cada presa inspeccionada en la isla de Kauai e indicaron que muchas de estas presas carecían de monitorización básica y de programas de mantenimiento.

Existían varias partes involucradas (Estado de Hawái, Condado de Kauai, propietario de terrenos y titular Mr. J. Pflueger, otras partes involucradas como Kilauea Irrigation Company Inc. “KICI”, etc.) en la aplicación de la legislación vigente, en la vigilancia, en la explotación y en el mantenimiento de la presa y el embalse, con cometidos poco claros, lo que supuso que se tratase de un tema complejo a la hora de depurar responsabilidades.

Algunas de las partes involucradas tomaron decisiones de manera unilateral a pesar de carecer de experiencia en seguridad de presas. Se considera que no se aplicaron buenas prácticas en materia de seguridad (falta de inspecciones, no tener en consideración la opinión de personal experto, clasificación de la presa inadecuada por riesgo de inundación aguas abajo, no elaboración e implantación de Plan de Emergencia, etc.)

Los recortes en el presupuesto y la falta de personal en DLNR pudieron influir en que las inspecciones de la presa Ka Loko no se llevaran a cabo según la normativa vigente (cada 5 años). Las inspecciones habrían detectado que el aliviadero no se encontraba operativo. Por lo tanto, se deberían haber realizado inspecciones, al menos cada cinco años, por parte del Estado de Hawái, independientemente de que el titular de la presa o los propietarios de las tierras no colaborasen o no facilitasen la realización de dichas inspecciones.

Mantener la clasificación de esta presa como de bajo riesgo, a lo largo de los años (desde 1972), también fue un error. Es decir, la presa se podría haber reclasificado. Si la presa se hubiese clasificado finalmente como de alto riesgo, además de pasar las inspecciones correspondientes, también se le habría requerido la elaboración y la implantación de un Plan de Emergencia.

Por otra parte, las agencias gubernamentales (DLNR, etc.) se centraron en infracciones relacionadas con los daños ambientales y no dieron el suficiente peso específico a la seguridad de la presa. También llamó la atención que otros inspectores del Estado de Hawái y del Condado de Kauai (PUC, DOH-CWB, etc.) no indicaron nada en relación con la no operatividad del aliviadero de la presa. Y la falta de un aliviadero operativo redujo en gran medida el margen de seguridad y contribuyó al colapso de la presa.

Desde entonces, los protocolos de seguridad y las inspecciones de las presas de Hawái han recorrido un largo camino y han mejorado, pero aún queda mucho trabajo por hacer.

RECOMENDACIONES

El programa de seguridad de presas estatales debería disponer de financiación suficiente para realizar las inspecciones de seguridad necesarias (incluyendo evaluación de los posibles modos de fallo: sobrevertido, erosión interna, licuefacción, etc.), para adecuar las instalaciones de las presas a la normativa vigente y para revisar la clasificación del riesgo potencial aguas abajo de las presas, actualizándolas a las nuevas circunstancias. De hecho, la Association of State Dam Safety Officials (ASDSO) recomienda dotar de más fondos y más personal al programa de inspección y mantenimiento de presas.

Se debería plantear la auscultación (instrumentación y monitorización) de las presas clasificadas como de alto riesgo y de las presas de riesgo significativo.

La Normativa de Seguridad de Presas debería revisar a partir de qué periodo de retorno los titulares de las presas quedan exentos de la responsabilidad de los daños que tengan lugar por la ocurrencia de un determinado evento extremo.

Todos los inspectores del Estado de Hawái y del Condado de Kauai, así como los titulares de las presas, deberían recibir una formación adecuada en seguridad de presas.