La presa de Whaley Bridge. Incidente y propuesta de soluciones

La redacción de este post ha sido posible gracias a la información y a las imágenes recopiladas a partir de las noticias de BBC News, Manchester Evening News, The Conversation, The Sun, The Telegraph, New Civil Engineer, las cuentas de Twitter @fathom_global y @MarenceMiro, la empresa Canal & River Trust, Google Earth, aportaciones de algunos residentes de Whaley Bridge, el Servicio de información sobre inundaciones del Gobierno del Reino Unido, aportaciones del Dr Mohammad Heidarzadeh (Brunel University London), Dr. Paul Samuels (HR Wallingford), etc.

Se trata del mayor incidente en el que ha estado involucrada una presa del Reino Unido desde hace más de una década. Algunos residentes de Whaley Bridge que estaban el jueves 1 de agosto de 2019 en el puente mirando hacia la presa dijeron que habían vivido aquí toda su vida y nunca habían visto algo así. En concreto, Carolyn Whittle, que vive en Meadowfield (Whaley Bridge) comentó que en 45 años nunca había visto el agua vertiendo por el aliviadero de emergencia de la presa.

El último incidente tuvo lugar con la aparición de fisuras en la presa de Ulley, cerca de Rotherham, durante las inundaciones de 2007, y posteriormente se construyó un nuevo aliviadero para reemplazar al aliviadero colapsado.

Mientras que la última vez que alguien murió debido a un fallo en una presa en el Reino Unido fue en 1925, cuando se rompieron dos presas, la presa de Llyn Eigiau que rompió por fallo en el cimiento y la onda de avenida provocó la rotura de la presa de Coedty situada aguas abajo (rotura encadenada de presas), muriendo 16 personas en el pueblo de Dolgarrog, al norte de Gales. Este hecho condujo a establecer mejores requisitos de construcción bajo la Ley de Embalses de 1930, actualizada en 1975.

El peor desastre documentado en el Reino Unido es el de la rotura de la presa de Sheffield en 1864, que provocó una gran Inundación y que costó la vida al menos a 240 personas.

Emplazamiento

Whaley Bridge es una pequeña ciudad en el distrito de High Peak de Derbyshire. Se encuentra a 25 kilómetros al sudeste de Manchester y tiene una población de aproximadamente 6455 habitantes. La ciudad está emplazada en el valle del Río Goyt y se encuentra a tan solo 500 m aguas abajo de la presa de Whaley Bridge.

Características de la presa y el embalse

Se trata de una presa de materiales sueltos con núcleo de arcilla. La presa data de 1831 y por lo tanto tiene 188 años de antigüedad. Aunque según la Agencia de Medio Ambiente los registros indican que el embalse fue construido entre 1840 y 1841. El embalse de Toddbrook tiene una capacidad de 1,3 hm³.

Su uso está destinado a abastecimiento (suministra agua al Canal de Peak Forest) y a la producción de energía hidroeléctrica. La titularidad es de Canal & River Trust. El embalse está declarado como Lugar de Especial Interés Científico.

El aliviadero de emergencia es el elemento más nuevo de la presa, y se cree que se terminó en 1969. El agua normalmente no fluye sobre este aliviadero, por lo que su eficacia no se había probado hasta ahora.

A continuación, se muestra un perfil longitudinal a lo largo del embalse y de la ciudad aguas abajo.

¿Qué sucedió?

El jueves 1 de agosto de 2019, las lluvias torrenciales en esta zona de Inglaterra originaron tales volúmenes de agua a la entrada del embalse de Toddbrook que provocaron el ascenso de los niveles de agua en dicho embalse y la entrada en funcionamiento del aliviadero de emergencia o aliviadero auxiliar, produciendo daños en el revestimiento de hormigón del citado aliviadero de la presa de Whaley Bridge, así como la erosión en una parte del cuerpo de materiales sueltos sobre el que apoyaban las losas del aliviadero; daños lo suficientemente graves como para poner en riesgo la seguridad de la propia presa, y por lo tanto, la seguridad de la población de aguas abajo.

Seguidamente se muestra una numeración indicativa de la evolución de los hechos que tuvieron lugar:

Lo que realmente tuvo lugar fue el colapso parcial del aliviadero de emergencia de la presa de Whaley Bridge el jueves 1 de agosto de 2019 por la tarde.

El aliviadero de emergencia revestido con losas de hormigón sufrió daños durante el vertido de la avenida en aproximadamente un quinto de la superficie del paramento. De hecho, la preocupación por la seguridad de la presa del embalse de Toddbrook comenzó la mañana del jueves 1 de agosto de 2019.

A las 12:30 h del mediodía, Canal & River Trust responsables del mantenimiento de la presa, alertaron a Kier, contratista del mantenimiento de la presa, de que podía existir un problema. Y 25 minutos después, se activó el plan de emergencia, por temor a que el agua que vertía sobre el aliviadero de emergencia desencadenara el colapso del citado aliviadero.

A las 14:15 h docenas de ingenieros estaban en el lugar, así como más de 100 empleados del servicio y una misión de rescate a gran escala estaba preparada para actuar sobre la presa.

Durante las horas cruciales del 1 de agosto de 2019, el ingeniero de Canal & River Trust, David Brown, admitió que había posibilidades de que la presa pudiera fallar. Aunque este ingeniero confiaba en que la presa podría salvarse. Richard Robson, miembro del All Reservoirs Panel, compartió ese mismo optimismo al comentar que se haría todo lo posible para salvar la presa.

Mientras tanto, en la presa, el director regional de la contrata Kier, Eddie Quinn, había comenzado a aplicar las actuaciones del plan de emergencia. De modo que se procedió a rebajar el nivel del agua en el embalse lo más rápido posible.

La Agencia de Medio Ambiente emitió una alerta dirigida a los residentes de Whaley Bridge y la Policía de Derbyshire comenzó a evacuar a las personas de sus hogares. Este incidente provocó la evacuación de más de 1500 personas (alrededor de 400 casas en Whaley Bridge).

Si la presa estuviera a punto de colapsar, la policía dijo que todos los vehículos del servicio de emergencia tocarían sus bocinas tres veces como advertencia y que los residentes tendrían que dirigirse a una zona alta. También se comentó que había diez botes de rescate disponibles en caso de que el valle se inundara.

El transporte público dentro y fuera de la ciudad se suspendió o fue redirigido, es decir, se cancelaron todos los trenes que pasaban por la ciudad, incluidos los trenes que circulan entre Sheffield y Manchester Piccadilly. El señor Wilson, un artista, tiene un estudio cerca de la estación de trenes de Marple, y también se vio obligado a cerrarlo.

También se cortaron las principales carreteras para evitar que se volviera a entrar en la ciudad, una vez que se había procedido a la evacuación. Se cerraron un total de 20 carreteras en Whaley Bridge y sus alrededores.

La policía también solicitó la noche del 1 de agosto de 2019 a los residentes de un pequeño número de propiedades ubicadas río abajo, en New Mills y Furness Vale, que abandonaran sus hogares.

El viernes 2 agosto de 2019 por la mañana, miles de residentes se estaban despertando después de haber sido evacuados y de pasar la noche en una escuela local en la vecina Chapel-en-le-Frith. Los ingenieros trabajaron durante todo el día, bombeando 105000 m³ de agua en 12 horas (2,5 m³/s). Sin embargo, el objetivo de reducir el volumen de embalse al 25% de la capacidad todavía estaba lejos y, aunque la lluvia se había reducido, la Oficina Meteorológica había emitido un aviso amarillo para los próximos días, es decir, había pronóstico de lluvia para los días siguientes, lo cual agravaba la situación.

El domingo 4 de agosto de 2019 todavía se consideraba la situación crítica y la amenaza vigente.

Finalmente, la evacuación de las personas residentes en la ciudad duró casi una semana.

Tras seis días de espera y después de las visitas del primer ministro Boris Johnson y del líder laborista Jeremy Corbyn, los residentes finalmente recibieron buenas noticias. A las 11:30 h del miércoles 7 de agosto de 2019, Canal & River Trust anunció que el embalse se había vaciado hasta el nivel objetivo, y no existía riesgo para las personas. Dos horas después, se tomó la decisión de permitir que los residentes regresaran a sus hogares.

Los expertos decían que el nivel del agua en el embalse debía descender ocho metros por debajo del nivel de los daños en el aliviadero antes de que los residentes evacuados pudieran regresar a sus hogares.

Después del incidente y del regreso de las personas evacuadas a sus hogares, han sucedido más episodios de lluvias fuertes. Por esa razón, todavía se mantenían las bombas para bajar el nivel del agua en el embalse, en función de las necesidades de las actuaciones que se están llevando a cabo y del mantenimiento de la seguridad aguas abajo.

¿Qué acciones se llevaron a cabo durante la gestión de la emergencia?

Las acciones incluidas en el plan para asegurar el aliviadero de emergencia de la presa fueron:

1) Desviar el agua que entraba al embalse hacia un curso de agua circundante diseñado para este fin, haciendo uso de 400 toneladas de material. La entrada al embalse se bloqueó mediante un dique provisional realizado con sacos de arena. Los soldados trabajaron para limpiar los escombros en el cauce de evacuación.

2) Recrecer el muro o umbral del aliviadero de emergencia de la presa con la finalidad de evitar un nuevo vertido sobre dicho aliviadero dañado.

3) Rebajar el nivel de agua en el embalse y aliviar la presión sobre la presa. Se rebajó el nivel del agua en el embalse para reducir el riesgo de una mayor erosión en el aliviadero de emergencia. El embalse se vació mediante un sistema de bombeo antes de que los residentes regresaran a casa. La empresa Kier instaló once bombas sumergibles y más de 1 km de tubería de bombeo. El servicio de bomberos también instaló nueve bombas de alta presión. El jueves 1 de agosto por la noche, los ingenieros de Kier realizaron tres aperturas, además de facilitar nuevos puntos de acceso, incluido un nuevo camino que recorría el embalse, lo que permitió la instalación y el mantenimiento de las bombas. Los equipos de emergencia bombearon agua con urgencia desde el embalse al Río Goyt.

4) Depositar grandes sacos llenos de material para sellar la brecha en el paramento del aliviadero de la presa y conseguir su estabilización. Se utilizaron 530 toneladas de mezcla de escollera, grava y arena, en sacos, que fueron depositadas sobre la zona afectada de la presa mediante un helicóptero, que formaba parte del operativo en el que estaban implicadas varias agencias. Posteriormente se aplicó una lechada de cemento para reforzar la integridad estructural de la actuación.

Adicionalmente se llevaron a cabo las siguientes acciones:

5) Monitorear el desembalse hacia el Río Goyt por parte de la Agencia de Medio Ambiente, que llevó un seguimiento de la gestión de la emergencia. Por otra parte, Canal & River Trust y el contratista Kier también asumieron la responsabilidad de la emergencia y participaron en el seguimiento de los niveles de agua en el embalse.

6) Capturar y transportar a miles de peces desde el embalse de Toddbrook a casi 160 kilómetros de distancia. Esta acción fue necesaria porque el nivel del agua objetivo se corresponde con el 10 por ciento de la capacidad habitual del embalse, tratándose de un volumen de agua demasiado bajo para mantener a todos los peces existentes en el embalse. Los peces se capturaron con grandes redes, con la participación de especialistas, antes de almacenarse en grandes tanques y transportarse en camión al embalse de Upper Bittell en Worcestershire, cerca de Birmingham. En esta primera fase de rescate se capturaron unos 30000 peces, que equivalen a unos 5000 kg, durante quince días aproximadamente y supuso docenas de viajes desde Derbyshire a Midlands. Siguiendo el consejo de los expertos, el resto de los peces se capturará y se realojará en las semanas siguientes, cuando el clima sea más fresco y sea mejor para la salud de los peces. El embalse de Upper Bittell tiene pocos peces ya que se vació para realizar trabajos de mantenimiento hace dos años y, por lo tanto, es capaz de albergar una gran cantidad de peces sin alterar el ecosistema local.

Una vez que se rebajó el nivel de embalse a una cota segura, pudo dar comienzo el trabajo de inspección y reparación en el aliviadero dañado de la presa, lo cual permitió conocer cuándo los residentes evacuados podían regresar a casa. De hecho, la parlamentaria laborista de High Peak, Ruth George, dijo a los residentes en una reunión comunitaria que las inspecciones de la presa podrían comenzar el martes 6 de agosto por la tarde mientras el agua continuaba drenándose.

¿Cuáles fueron las primeras impresiones de los expertos?

En el caso del embalse de Toddbrook, las imágenes del aliviadero de emergencia pueden indicar falta de mantenimiento. Se distinguen plantas que crecieron en la superficie de las losas de hormigón del citado aliviadero. Esto podría significar que la superficie de hormigón ya estaba fisurada en aquel entonces, o que las juntas entre losas no estaban selladas adecuadamente.

Algunas de las preguntas que surgieron cuando se produjo el incidente fueron ¿Las juntas de las losas del paramento del aliviadero estaban ejecutadas adecuadamente? ¿Las losas estaban armadas? ¿Existían humedades o filtraciones en la zona del aliviadero que ha colapsado?

El aliviadero de emergencia actual se reparó alrededor de 1969 después de que sufriera daños similares a los actuales en el invierno de 1964. Con casi 50 años de antigüedad, ¿el revestimiento de hormigón del aliviadero de la presa habría llegado al final de su vida?

Las fotografías que muestran la vegetación en el paramento del aliviadero de la presa de Whaley Bridge han llevado a algunas personas a preguntarse si se realizó el mantenimiento correctamente.

Algunos expertos, como Roger Meredith, ingeniero que participó en la construcción de la presa de Tarbela en Pakistán, opinan que el agua podría haber circulado bajo las losas de hormigón del aliviadero de emergencia. La presencia de vegetación en el paramento del aliviadero no suele ser una buena señal porque las raíces atraviesan las juntas entre losas y las fisuras. Es probable que se haya producido el ingreso de agua bajo las losas y la velocidad del agua pudo erosionar el terreno subyacente bajo las citadas losas de hormigón. En definitiva, la vegetación puede mostrar vías de acceso que permiten que el agua se infiltre llegando a los materiales sueltos del cuerpo de la presa y produciendo erosión interna, tubificación o “piping”.

Alan Warren, presidente de la British Dam Society, dijo que la causa no estaba clara. A priori, se desconoce si el hormigón del aliviadero era inadecuado o si hubo algún problema bajo las losas de hormigón, por ejemplo, erosión interna. Tal vez las juntas entre las losas no estaban correctamente selladas y el agua se filtraba por las juntas. Warren afirma que el incidente de la presa de Whaley Bridge es similar al incidente ocurrido en la presa de Oroville (California, 2017), ya que en la presa de Oroville se dañó el aliviadero principal, posteriormente el aliviadero de emergencia entró en funcionamiento y se produjo erosión aguas abajo, y ante el riesgo de colapso del aliviadero de emergencia se procedió a evacuar a la población.

Richard Coackley ex presidente de la Institución de Ingenieros Civiles dijo que las fotos sugerían que el agua había erosionado las tierras bajo las losas, pero el núcleo de arcilla todavía estaba intacto. Y que, por esa razón, la presa siguió en pie. Según una ley del Parlamento que se remonta a 100 años atrás, cada presa debe tener asociados un ingeniero civil supervisor y un ingeniero civil de inspección para presentar informes de seguridad anuales.

Tanto en Inglaterra como en Gales todos los embalses con una capacidad superior a 25000 metros cúbicos deben cumplir con la Ley de Embalses. Dichos embalses se someten a inspecciones al menos cada 10 años por parte de expertos que establecen medidas de seguridad que deben tomarse dentro de los límites de tiempo establecidos y posteriormente certifican que esos trabajos se han llevado a cabo satisfactoriamente.

Manousos Valyrakis, profesor de ingeniería del agua en la Universidad de Glasgow, dijo que la presencia de vegetación indica que la humedad puede haberse acumulado en esa zona, y si el agua penetra, podría conducir a la erosión interna. Sin embargo, él piensa que el colapso también pudo producirse por la desestabilización hidráulica de la superficie del aliviadero (desalineación de las losas de hormigón que provoca el aumento de las acciones hidráulicas…)

El profesor Roderick Smith, del Imperial College de Londres, comentó que los eventos climáticos extremos están poniendo de manifiesto una creciente incertidumbre sobre la seguridad de las presas antiguas: particularmente la necesidad de evacuar el agua de manera segura y fácil.

El Dr. Panagiotis Michalis ha estado realizando investigaciones sobre presas en el Reino Unido desde 2010 como parte del trabajo de consultoría a través de la Universidad de Strathclyde. El Doctor piensa que algunas presas cuentan con infraestructura obsoleta y que incidentes como el de la presa de Whaley Bridge pueden ser cada vez más frecuentes. En el Reino Unido, la mayoría de las presas tienen más de 100 años, y eso significa que pueden haber excedido su vida útil. Por otra parte, en aquel entonces, los estándares de diseño no tenían en consideración los escenarios de cambio climático actual, por lo que cuentan con un diseño obsoleto.

El director técnico de presas y embalses de HR Wallingford, Craig Goff, que también forma parte del Panel de Ingenieros Supervisores (Supervising Engineers Panel), creado para asesorar a los titulares sobre la seguridad de las presas, opina que el Reino Unido tiene uno de los protocolos de inspección de presas más estrictos del mundo. La Ley de embalses de 1975 se aplica en el Reino Unido y también se aplica en lugares como Hong Kong y Singapur.

El Dr. Mohammad Heidarzadeh, ingeniero de la Universidad Brunel de Londres, dijo que este tipo de diseños en presas de materiales sueltos pueden colapsar rápidamente. Lo cual lleva a plantearse la siguiente cuestión ¿Es un error permitir asentamientos urbanos aguas abajo de presas con estas características?

Según el Dr. Paul Samuels (HR Wallingford) gran parte de la infraestructura hidráulica de Reino Unido es antigua (algunas presas en uso hoy en día se construyeron hace más de 200 años) y las presas están experimentando los impactos del cambio climático a través de los cambios en los patrones de lluvia y los efectos del aumento de la temperatura. La clave está en mantener y monitorear las infraestructuras críticas, en lugar de construir nuevos embalses. Las presas deben ser inspeccionadas regularmente y los titulares deben abordar los problemas que se identifiquen.

En Inglaterra, el diseño de presa más común es la de materiales sueltos con un núcleo de arcilla impermeable. Estas presas de materiales sueltos representan el 83 por ciento del total (2042 registradas bajo la Ley de Embalses). Entonces, es importante plantearse ¿cuáles son los mecanismos de fallo y los problemas asociados con las presas de materiales sueltos? Pues bien, aunque no se han registrado muertes durante casi 100 años, los incidentes que no han llegado a fallo catastrófico son frecuentes. Un informe preparado para la Agencia de Medio Ambiente en 2013 analizó los 76 incidentes registrados entre 2004 y 2013. Estos incidentes se relacionaron más comúnmente con el sobrevertido y la erosión interna. En 2013, la notificación de tales incidentes se hizo obligatoria y la Agencia de Medio Ambiente publica resúmenes anuales con lecciones que aprender de cada incidente.

A pesar de las afirmaciones de que había vegetación creciendo en las juntas de las losas de hormigón que comenzaron a romperse, Rob Jowitt (gerente del proyecto) insistió en que se realizaban inspecciones periódicas, semanales y diarias de la presa en el embalse de Toddbrook antes del incidente y que creen que el problema acontecido se corresponde con una anomalía, que está siendo objeto de investigación detallada. Se argumenta que todo sucedió de repente, es decir, no hubo advertencia de que se iba a producir un fallo. Por esa razón, al suceder por sorpresa, sin señales de que se estaba produciendo un fallo, se considera una anomalía. Canal and River Trust sostiene que la presa estaba en buenas condiciones cuando se realizó la inspección anual en noviembre de 2018. Y esta inspección anual coincidió con una inspección independiente que se realiza cada 10 años, y que concluyó que la presa también estaba bien.

Propuesta de soluciones tras la emergencia

Tras el incidente de la presa de Whaley Bridge (colapso parcial del aliviadero de emergencia) se ha solicitado una revisión independiente. Se espera disponer de un informe provisional antes de fin de año. La secretaria de Medio Ambiente, Theresa Villiers, dijo que la revisión examinaría qué causó el daño y si podría haberse evitado.

Se estima que las reparaciones en la presa del embalse de Toddbrook puedan requerir un plazo de hasta tres años. La Sra. Villiers comentó que en el Reino Unido se dispone de un excelente historial de seguridad de presas y embalses, pero es importante aprender de este incidente, compartiendo las lecciones aprendidas e incorporando los cambios necesarios a la legislación existente.

La crisis de la presa de Whaley Bridge ha llevado a la Agencia de Medio Ambiente a ordenar controles de seguridad en 2000 presas en todo el país. De hecho, se han realizado inspecciones adicionales en ocho embalses con aliviaderos de hormigón similares al embalse de Toddbrook, pero no se han detectado problemas de seguridad. El titular de la presa, Canal and River Trust, también está preparando un informe sobre las causas del incidente.

Los avances tecnológicos en el monitoreo de presas también van a mejorar las herramientas de los técnicos que se dedican a la inspección de presas para detectar anomalías en las estructuras. Actualmente destacan los avances en monitoreo espacial que se están realizando con la Agencia Espacial del Reino Unido. También se están desarrollando herramientas que utilizan el magnetismo para controlar los asientos en las presas.

Los planes de emergencia (simulación de la rotura de la presa, afecciones, evacuación…) forman parte de los procedimientos de la seguridad de presas, junto con el monitoreo y la vigilancia de presas.

Las simulaciones hidráulicas aportan información para la planificación de contingencias civiles, como la extensión máxima de la inundación, la velocidad máxima del agua, el tiempo de llegada de la onda de avenida, la secuencia de cierre de rutas de evacuación, posible extensión del daño estructural a edificios, carreteras, puentes, etc.

Para los embalses, el énfasis está en la inspección y mantenimiento de las presas, en la planificación de contingencias civiles y en la revisión de incidentes menores para buscar la mejora continua. El pronóstico en tiempo real de las entradas al embalse también puede resultar de utilidad para anticiparse a situaciones de emergencia.

Ninguna de estas herramientas evitará un colapso de la presa por sí misma, pero formarán parte del abanico de herramientas que el ingeniero empleará en la inspección, y ayudarán a identificar los riesgos correspondientes.

Garantizar la seguridad de las presas y de los embalses es complejo y requiere conocimientos, recursos, coordinación y comunicación entre las diferentes administraciones, empresas, etc. En una emergencia, la evacuación preventiva de una comunidad en riesgo se llevará a cabo utilizando procedimientos bien establecidos y practicados de conformidad con la Normativa existente.

Entre las acciones importantes para la seguridad de presas se pueden destacar: la vigilancia (incluyendo auscultación, seguimiento mediante la monitorización de las variables de control e inspección), el mantenimiento, la actualización de los criterios de diseño de las presas (sismo, sedimentación de embalses…), la gestión de avenidas y la seguridad hidrológica (teniendo en consideración el cambio climático y su influencia en la intensidad de los eventos extremos y en la capacidad de los órganos de desagüe), el hecho de que cada presa debe disponer de plan de emergencia (para los asentamientos en zonas inundables se necesita disponer de un plan de evacuación eficiente). Estas acciones pueden servir para prevenir incidentes, evacuaciones, reparaciones costosas, etc.

La duración de las obras de reparación de la presa de Whaley Bridge podría ser de dos o tres años y el presupuesto de ejecución ascendería a varios millones de euros; el coste vendrá determinado por el diseño de la solución que se adopte. El gerente del proyecto Rob Jowitt advirtió que no será una operación sencilla. Canal and River Trust son responsables del mantenimiento de la presa, y ahora están comenzando a planificar el proceso de reparación.

Ahora se iniciarán investigaciones para determinar exactamente qué provocó el colapso parcial del aliviadero y se formularán preguntas sobre la solidez de las inspecciones en las presas del país.

Conclusiones

Entre los posibles factores que contribuyeron al incidente de la presa de Whaley Bridge destacan el diseño del aliviadero de emergencia con revestimiento de losas de hormigón situado sobre el propio cuerpo de la presa de materiales sueltos, así como la baja calidad del hormigón y un mantenimiento pobre, evidenciado por la presencia de vegetación en el paramento del aliviadero.

El incidente del aliviadero de emergencia de la presa de Whaley Bridge constituye una nueva llamada de atención. Las obras hidráulicas necesitan vigilancia y mantenimiento. Es esencial que las presas sean inspeccionadas rigurosamente y que se les lleve un seguimiento.

Cuando un aliviadero se daña como en Whaley Bridge, la presa queda más indefensa frente a nuevas avenidas. A medida que la lluvia continúa, las socavaciones pueden hacerse más grandes, erosionando aún más el cuerpo de la presa y debilitando su resistencia frente a la energía del agua en el embalse.

Según los datos de incidentes en las presas, tanto en el Reino Unido como en el resto del mundo, la causa más común de fallo se debe a la capacidad inadecuada del aliviadero para laminar la avenida, debido a daños o debido a un diseño inadecuado.

Existe la posibilidad de que se evacue a la población y luego no pase nada, como ha ocurrido en Whaley Bridge en 2019 y como ocurrió en Oroville en 2017, pero eso es mucho mejor que no evacuar y que luego suceda la rotura de la presa.

Siempre quedarán lecciones por aprender, pero lo que es seguro es que no se debe prescindir de la vigilancia y del mantenimiento de las presas.